Anna B Savage

“A Common Turn” (2021) confirmaba por fin, seis largos años después de un EP revelador, la aparición de una nueva y vibrante voz en el pop de autor(a) moderno. Hablamos de Anna B Savage, dueña de una voz grandiosa a la par que elocuente, de un manierismo operático, como corresponde a la hija de un par de cantantes clásicos profesionales. Sus melodías son tan volubles como el pensamiento existencial que las impulsa, cargado sobre todo de preguntas y autocuestionamiento. Los misterios de las relaciones, la sexualidad y nuestra cabeza, expresados en términos nada concluyentes. Hay inteligencia y poder de pensamiento en eso; en saber decir, de vez en cuando, “no lo sé”.

Las tres canciones originales de “These Dreams EP” se mueven en parecidas coordenadas, esencialmente porque se grabaron en las sesiones del álbum y solo saltaron del tracklisting por decisiones de secuenciación, no de depuración. Podrían haber entrado en el disco, tenían el nivel, pero Savage prefirió dejar “A Common Turn” en 47:02 minutos, todo un detalle en días en que los lanzamientos de discos, sobre todo en plataformas, son como volcados nada selectivos de discos duros.

Consecuente con su conocida línea voluble, Savage transita en este breve EP entre lo más doloroso y lo más reparador, depurando de nuevo el arte del crescendo en canciones que son más greatest hits que flojas outtakes. La primera en la frente: “These Dreams”, cortante conjunción de guitarras controladas pero abrasivas, un ritmo que acaba fascinando con su fuerza monocorde y sintetizadores de fantasía oscura. Sobrevolando todo, las piruetas de la voz de Savage.

En cierto contraste con sus odas a la confusión, “Since We Broke Up” es “positiva y desafiante”, en sus propias palabras. En ella se dedica a enumerar las cosas que ha hecho siendo soltera, como, por ejemplo, leer más que nunca, incluso más que en la universidad. Es una especie de “I Get Along Without You Very Well” (el estándar compuesto en 1939 por Hoagy Carmichael) sin ironía triste. O, bueno, un poco: nadie se cree que una artista tan pasional como Anna B Savage sueñe con no volverse a enamorar, como los protagonistas de “I’ll Never Fall In Love Again” de Bacharach & David. Además, es posible recordar con cariño a un ex, como hizo Savage en “Baby Grand”, cuya precuela se incluye en este EP: “Hairier Now” es otra canción coprotagonizada por su primer novio, el cineasta y artista visual Jem Talbot.

Si en “Baby Grand” hablaba sobre “la taza del búho de Edwyn Collins”, aquí rinde homenaje al genio escocés con, directamente, una versión de nada menos que su canción más querida. ¿Se puede hacer un cover de “A Girl Like You” y no quedar fatal? Ella lo consigue cambiando los cálidos aires northern soul del original por un ambiente electro-gótico que realmente sienta bien a la composición. En algún lugar, Billie Eilish o Trent Reznor escuchan y sonríen. Con todos los respetos por las tres canciones originales, esta versión es el verdadero hallazgo del EP. ∎