Álbum

Avishai Cohen

Naked TruthECM, 2022

No, no funcionó demasiado bien la aventura electrónica del trompetista y compositor israelí Avishai Cohen (no confundir con su compatriota, el contrabajista del mismo nombre) en su precedente “Big Vicious” (2020). Alejándose del formato acústico que le había aportado crédito tanto a su propio nombre como a la cabeza del proyecto Triveni, el disco perdía en resolución aquello que ganaba en intención por desmarcarse de su contexto primigenio, sin poder esquivar, lástima, un territorio trillado y predecible que apenas ha aportado a su meritoria crónica.

El regreso ahora a la estructura instrumental de cuarteto acústico que dirigió certeramente en el espléndido “Cross My Palm With Silver” (2017) implica también el retorno de la inspiración a su música, sin caer, ni mucho menos, en la reiteración. De hecho, Cohen enarbola en este “Naked Truth” –su quinto álbum para ECM si incluimos “Playing The Room” (2019), compartido con su pianista Yonathan Avishai– un discurso más extractado del habitual, que partió en principio de breves y rasos fragmentos melódicos a partir de los cuales se fue alzando esta hermosa “Suite In Nine Parts” que subtitula el álbum. Su diáfana sonoridad, deudora del mejor Miles Davis, y un abierto desarrollo enmarcan este juego de fraseos, modulaciones y silencios donde la sugerencia se impone a la evidencia y en el que tienen bastante que decir un habitual cuadro de colaboradores con el citado Yonathan Avishai a la cabeza –si quieren más, busquen también su álbum en trío “Joys And Solitudes” (2019)–, el contrabajo de Barak Mori y la batería de Ziv Ravitz. Juntos reivindican su dimensión a través de una capacitada asimilación de la narración, pero también de la mano de un decisivo pulso improvisador que encaja como un guante en la filosofía de la obra, potenciando así su espontaneidad.

Por si faltara algo, el trabajo no se extiende más allá de lo estrictamente necesario, concentrando en sus treinta y cinco minutos la naturaleza de una propuesta que encubre mucho en su aparente sencillez. El recitado final de Cohen del texto “Departure” de la poeta israelí Zelda Schneurson Mishkovsky (1914-1984), donde se reflexiona sobre renuncia, mortalidad y la importancia de aceptar la partida, subraya un punto más la condición evocadora y enigmática de un álbum al que volver una y otra vez sin miedo al bostezo. ∎

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