Doja Cat es una de las artistas más interesantes de los últimos años. Y no me refiero solo a lo musical. Me refiero a que la tía ha decidido que ella vive en la Doja Cat Fantasy y que esa es una realidad paralela extravagante… pero infinitamente divertida. Si no la sigues en redes, hazlo ya y compruébalo por ti mismo.
Su última locura ha sido plantarse en el desfile de Schiaparelli durante la Paris Fashion Week rebozada en un total de 20.000 cristales de Swarovski rojos. Y, cuando digo “rebozada”, me refiero a “literalmente rebozada” y con cristalitos hasta en la cabeza calva. Lo mejor de todo es que tenía excusa: su modelo estaba basado en el Infierno de “La Divina Comedia” de Dante, que era la principal inspiración de la colección que se estaba presentando. Aunque también hay que puntualizar que el director creativo de la marca, Daniel Roseberry, materializa esta inspiración en falsas cabezas de animales y no en súcubos calvos envueltos en pedrería roja. Todo en la vida es cuestión de elecciones.
Como era de esperar, porque esta mujer se ha convertido en una verdadera
killer de las
fashion weeks y todo el mundo la espera en palmitas, Doja Cat fue sentada en pleno
front row… Lo sorprendente es que la sentaron al lado de Kylie Jenner, la pequeña del clan de las Kardashians, que aterrizó en el desfile con una cabeza gigantesca de (falso) león en el hombro. Este vestido, por cierto, y a diferencia del de Doja, sí que pertenecía a la colección presentada.
Y aquí llega el retruécano viral: Kylie Jenner llegó pensando que iba a partir la pana y se encontró con la circa de persona de Doja Cat a su lado atrayendo todas las miradas. Lo que ocurrió fue
esto, aunque el mejor resumen visual de lo ocurrido está
aquí mismo. Internet, obviamente, tiene mucho que decir al respecto del
outfit de Doja, tal y como queda constancia
en este tuit y
en este otro. Pero tiene más que decir todavía sobre el duelo de divas, tan similar a
otras escenas míticas como esta o la que usamos a continuación para cerrar el asunto.