Elena Nieto es Yawners. Foto: Sharon López
Elena Nieto es Yawners. Foto: Sharon López

Entrevista

Yawners, el cielo es el límite

Con su primer álbum, abrió puertas de festivales y medios tanto europeos como estadounidenses, apuntalando la proyección internacional de una propuesta que apela a las enseñanzas del indie rock y el pop punk de los 90. El nuevo trabajo de Yawners mantiene esa apuesta artística con firmeza y amplía alianzas foráneas para conseguir todavía más difusión lejos de aquí.

Corría el año 2019 cuando cayó en mis manos el disco de debut de un proyecto para mí aún desconocido. En la portada aparecía una chica con gorra mirando de lado. Parecía una foto tomada sin previo aviso, y del mismo modo, sin avisar, me voló la cabeza. Eran diez canciones resplandecientes, frescas, llenas de una energía contagiosa que me recordaban a lo mejor del indie rock de los años 90. Caí rendido ante la propuesta y me hice fan de inmediato. Era el primer disco de Yawners, titulado “Just Calm Down” (La Castanya, 2019).

Detrás de Yawners está Elena Nieto, responsable total del proyecto. Acaba de estrenar su segundo disco, “Duplo” (Montgrí, 2022), diez nuevas canciones donde el castellano gana posiciones frente al inglés predominante del pasado y donde la propuesta se consolida definitivamente como una de las más prometedoras del rock de aquí y de ahora. La portada es parecida a la de su anterior álbum, pero esta transmite cosas muy diferentes. Aparece en la misma postura –de lado, con su gorra–, pero tras Elena se abre un fondo azul claro, haciéndonos ver que ahora para ella el cielo es el límite.

Lo primero que me sorprendió cuando te escuché por primera vez fue ese sonido anacrónico tan de los 90. ¿De dónde viene esta querencia?

Básicamente de la música que escuchaba cuando iba al instituto, que vino de ninguna parte. Habitualmente la música que escuchas en la adolescencia te la recomienda alguien, pero yo la fui descubriendo en YouTube, aleatoriamente. No tenía ningún amigo que compartiese gustos conmigo. Empecé a mamar mucha música de internet, aunque paradójicamente no fuese música de la era de internet. A raíz de ahí me empezó a llamar la atención tocar la guitarra, y luego vino todo lo demás.

Precisamente la era de internet ha cambiado la forma de consumir música. ¿Para ti qué sentido tiene editar discos?

Creo que le da una seriedad y una identidad a la música que haces que sea muy importante. Ahora mismo hay dos maneras de producir música. Una es sacar single tras single y hacer que la canción en sí sea muy efímera, porque a las dos semanas de estar fuera es como si ya se hubiera pasado su momento. Y la otra es hacerlo de un modo más tradicional y ponerte a hacer un disco y darle la importancia que tú quieras darle. Yo creo que aún es importante sacar discos.

“Para este disco tenía varias canciones en inglés y varias en castellano, y pensé que quizá era el momento de darle coherencia a todo y pasar las que estaban en inglés a castellano o viceversa. Pero después vi que no funcionaban tan bien”

Elena Nieto

De hecho, he visto que has cuidado mucho la edición. ¿Todo eso lo supervisas tú misma?

Sí. Cuando terminé de grabar el disco me senté a plantear cómo quería editarlo y decidí, un poco de manera ambiciosa, buscar varios sellos en el mundo –lo editan cuatro diferentes– para que tuviera el mayor alcance posible. El resultado ha sido que el disco se va a editar por los diferentes sellos, que cada uno de ellos se lo ha currado un montón. En España Montgrí lo ha fabricado en varios colores, en Inglaterra han hecho dos versiones diferentes y en Estados Unidos han hecho otras dos distintas… Al final hay como ocho versiones diferentes, y que haya tanta variedad me encanta.

No sabía que lo sacabas también fuera de España.

Sí, en España y Latinoamérica lo edita Montgrí, en el resto de Europa lo publica un sello inglés que se llama Big Scary Monsters y que es el que saca a American Football o The Get Up Kids, bandas a las que admiro un montón. En Estados Unidos lo edita Counter Intuitive, el label que edita a grupos como Mon Jeans. Y en Japón lo publica el sello que ya sacó mi primer disco, Inparmaint Inc.

¿Esto significa que vas a poder girar por todos estos sitios?

Sí. De hecho la gira europea ya se ha anunciado. Serán quince conciertos por toda Europa que empiezan a finales de septiembre, y tengo muchas ganas. El plan es también, con el apoyo del sello estadounidense, ir a girar a Estados Unidos. Pero ya de cara al año que viene, porque no quedan días libres este año. Y Japón también. Ojalá pueda salir todo como lo tenemos previsto.

Segundo disco, grandes expectativas. Foto: Sharon López
Segundo disco, grandes expectativas. Foto: Sharon López

Precisamente, hablando de todo este trabajo, me impresiona especialmente saber que lo haces todo tú sola. ¿Cómo te las apañas?

Es un poco una gran odisea. Debes tener las ideas bastante claras, sentarte y escribir tus objetivos, lo que quieres hacer y lo que tienes que hacer. Porque siendo solo una persona es complicado. Para una banda de cuatro, por ejemplo, donde cada uno pone su granito de arena, debe de ser mucho más sencillo y más abarcable. En mi caso, compongo las canciones y las grabo en mi casa, donde tengo un pequeño estudio. Aquí las preproduzco y, con esto, me voy al estudio y grabo todo. En este disco lo he tocado todo menos las baterías, que las ha grabado Joan Delgado, de Cala Vento, porque yo toco, pero no tan bien como él, y es importante que el resultado sea el mejor posible. Después, a nivel de buscar sellos y hacer el planteamiento es simplemente… bueno, yo antes trabajaba en un sello discográfico, en La Castanya, e hice un máster de industria musical, con lo que tengo una base de la que poder partir para pensar qué es lo que quiero hacer, cómo contactar con la gente, saber qué es un contrato, qué está bien y qué no está bien. Al final es ponerte y saber cómo va la industria y qué es lo que quieres hacer con ella.

¿Hablaste con Montgrí para que te editaran ellos el disco?

La verdad es que cuando me senté a plantear qué quería hacer con este álbum a nivel internacional lo tenía bastante claro, a quién quería tirarle la caña y demás. Y ya lo tenía todo más o menos hablado. Pero en España no sabía muy bien qué quería hacer. Me senté con bastantes sellos a ver qué propuestas había y al final me decanté por Montgrí porque son muy jóvenes; tienen muy poquitas referencias, pero las que tienen me parecen la hostia, y poseen esa frescura y esa motivación que a lo mejor otros sellos con más experiencia han perdido. Pensé que merecía la pena darles la oportunidad porque creo que lo van a hacer de puta madre y hay que apostar por las cosas nuevas. Aparte son supercolegas. Me pareció la mejor opción.

En Montgrí están también Biznaga. Me llama la atención lo diferentes que son vuestros planteamientos. Mientras ellos hablan de una realidad generacional, tú te centras en cosas más personales basándote en tus propias experiencias. ¿Nunca has intentado ir por ese camino un poco más punk?

Biznaga tienen letras muy políticas y yo escribo sobre lo que me sale, no es una cosa que yo decida. Si de repente dijera que quiero escribir sobre un tema más candente y menos personal, no creo que me saliera. La verdad es que creo que las dos vertientes tienen sus dificultades y sus facilidades.

“Al final, sobre todo en mi caso, que escribo cosas muy personales, es importante tener una continuidad a la hora de escribir canciones y aprovechar las cosas que te pasan, las vivencias y los sentimientos que tienes en un momento determinado para ir escribiendo cosas porque, si no, si lo escribes todo de golpe, no mola tanto”

Elena Nieto

¿Y por qué en español y en inglés? ¿Cómo decides qué idioma usar en cada canción?

Es algo que no está determinado por nada. Simplemente cuando comencé a componer canciones nuevas y a escribir las letras, algunas me salían en inglés y otras en castellano. Cuando empiezo a hacer una canción, a veces surge de una frase que se me ocurre, o sea, que el idioma está ya muy predeterminado desde el comienzo. Para este disco tenía varias canciones en inglés y varias en castellano, y pensé que quizá era el momento de darle coherencia a todo y pasar las que estaban en inglés a castellano o viceversa. Pero después vi que no funcionaban tan bien, y pensé: A la mierda. Si me han salido así, aunque pueda ser una idea horrible, las voy a dejar así. Y creo que ha sido una buena idea, porque a la gente le están gustando tanto en un idioma como en otro.

Una de las canciones del disco se titula “Rivers Cuomo”. ¿Por qué él?

Porque soy muy fan de Rivers Cuomo. Me parece un friki bastante grande, un personaje muy guay. Esa canción la escribí porque leí una entrevista en la que contaba que después de tantos años editando discos había llegado a un método de escribir canciones con el que, aplicando una fórmula, es capaz de unir frases, melodías y ruedas de acordes que casan bien juntas y que previamente ha ido anotando en un archivo de Excel cuando se le van ocurriendo. Y a partir de ahí empieza a componer una canción. Cuando lo leí me quedé flipando en plan“tío, ¿en qué momento se te ha ocurrido eso?”. Tiempo después estaba un poco atascada con una idea y al recordarlo decidí hacer una canción que hablara de ello.

Yawners: “Rivers Cuomo”.

Hace años, hablando con Kurt Wagner, de Lambchop, me dijo que su método de trabajo para componer era intentar escribir una canción cada día, todos los días. Jorge Drexler me contó que él hacía algo que era casi todo lo contrario. Cuando tenía que componer un disco, se tomaba una semana para hacerlo y, una vez que le habían salido cierto número de canciones, daba el ejercicio de composición por terminado. ¿Cómo lo haces tú?

¡Es que son dos extremos muy extremos! Yo creo que estoy un poco en el medio, en el sentido de que hasta que no tengo encima la presión de que me estoy planteando grabar un disco no me pongo mucho las pilas. A lo mejor tengo un par de temas que se me han ocurrido un día, pero… Al final, sobre todo en mi caso, que escribo cosas muy personales, es importante tener una continuidad a la hora de escribir canciones y aprovechar las cosas que te pasan, las vivencias y los sentimientos que tienes en un momento determinado para ir escribiendo cosas porque, si no, si lo escribes todo de golpe, no mola tanto.

Y ahora ¿estás componiendo o has volcado todo lo que tenías en este disco?

No me he vuelto a poner a componer porque ahora tengo un curro que me muero, con todo el trabajo de la salida del disco, grabar los videoclips… Piensa que gestionarlo todo con cuatro sellos es mucho más complicado que hacerlo con uno solo. Pero espero que de aquí a nada esté un poco más relajada y pueda ponerme a escribir de nuevo.

¿Compaginas todo este jaleo con otro trabajo?

No, ahora me dedico solamente a la música. A ver, solo a la música, pero no solo a Yawners. Me explico: también hago trabajo de composición para otra gente y de músico de directo… Ahora estoy de gira con Rojuu tocando la batería y llevamos ya veintipico conciertos Tengo la agenda apretada, pero estoy superagradecida de poder hacer música y nada más. ∎

Etiquetas
Compartir

Contenidos relacionados