Para poder leer el contenido tienes que estar registrado.
Regístrate y podrás acceder a 3 artículos gratis al mes.
Bajo
Suscripción
Pues lo que parecía un encuentro más o menos casual entre Julien Baker, Phoebe Bridgers y Lucy Dacus, el proyecto boygenius –que nos regaló en 2018 el EP “boygenius”, seis canciones en veintidós minutos que dejaba con ganas de más, mucho más– se lo ha tomado con calma, pero el asunto parece que va realmente en serio y, cinco años después y desde una poderosa multinacional (el EP lo publicó Matador), ya tenemos el primer álbum del trío. Y menudo álbum: lo mejor de sus tres mundos condensado en una docena de nuevas canciones donde la simbiosis entre el trío de creadoras norteamericanas florece con brío y esplendor.
Instigado por Bridgers, este reencuentro nos enseña cómo el paso del tiempo y sus respectivas carreras en solitario –Baker publicó “Little Oblivions” en 2021; Dacus entregó “Home Video” en 2021; y Bridgers desbrozó “Punisher” en 2020– ha jugado a favor de su songwriting y ha depurado sus acercamientos al folk y al rock de costuras clásicas.
Arropadas por, entre otros, Melina Duterte (Jay Som), Carla Azar (Autolux), Sarah Tudzin (Illuminati Hotties) y Catherine Marks (coproductora), boygenius han compactado su precioso ménage à trois y lo dejan claro desde la inicial “Without You Without Them”, un corte a capela que enlaza con la parte final de “Ketchum, ID”, el tema que cerraba el EP, una plegaria conjunta que es un agradecimiento a todas sus predecesoras y predecesores: “Give me everything you’ve got / I’ll take what I can get / I want to hear your story / And be a part of it / Thank your father before you / His mother before him / Who would I be without you, without them?”. Es un comienzo hermoso e impactante que prepara el camino para un trayecto de confesiones amorosas y de lazos de amistad que va alternando los dioramas de calma en clave folk-rock con achuchones de ADN con el rock en perfecta ebullición: vean “$20”, el tema que adelantó este retorno, una canción concebida por Baker y apuntalada en resolutivos riffs de guitarra que desemboca en un final demente con Bridgers desbocada gritando los versos finales (y no se pierdan el vídeo, con esa escena de pacto de sangre entre las tres protagonistas).
En “Emily I’m Sorry” Bridgers toma las riendas en la canción más confesional del álbum, historia de una relación que acabó mal y en la que la autora implora el perdón y se desnuda en versos como “I’m twenty-seven and I don’t know who I am / (Don’t know who I am) / But I know what I want / Emily, I’m sorry / Emily, I’m sorry / I’m sorry”: destilado de delicadeza sonora o cómo airear sin caer en la impudicia esas cicatrices del pasado que todos coleccionamos.
El bálsamo continúa con “True Blue” (Dacus al habla: “And it feels good to be known so well / I can’t hide from you like I hide from myself / I remember who I am when I’m with you / Your love is tough, your love is tried and true-blue”) y sigue Baker reviviendo el aura de Simon & Garfunkel (gracias a Paul Simon en los créditos) en una “Cool About It” que da paso a “Not Strong Enough”, uno de los highlights de “the record” con Bridgers expendiendo una de las frases definitivas del disco (“Not strong enough to be your man / I tried, I can’t”; la otra la encontramos en boca de Dacus en “Leonard Cohen”: “Leonard Cohen once said / ‘There’s a crack in everything, that’s how the light gets in’ / And I am not an old man having an existential crisis / At a buddhist monastery writing horny poetry / But I agree”).
Las dinámicas “Satanist” (“Will you be an anarchist with me? / Sleep in cars and kill the bourgeoisie”) y “Anti-Course”, separadas por la pureza folkie de “We’re In Love” (Dacus in heaven: “I feel crazy in ways I never say / Will you still love me if it turns out I’m insane? / I know what you’ll say, but it helps to hear you say it anyway”), se dirigen hacia la final “Letter To And Old Poet”, cocción a fuego lento de otro estriptis emocional de Bridgers: “I said, ‘I think that you’re special’ / You told me once that I’m selfish / And I kissed you hard / In the dark, in the closet / You said my music is mellow / Maybe I’m just exhausted / You think you’re a good person / Because you won’t punch me in the stomach / And I love you / I don’t know why / I just do, ooh, but”.
¿Crosby, Stills & Nash para los dosmiles y en clave LGTBIQ+? Derribemos estereotipos y disfrutemos con un disco repleto de confraternidad, honestidad, catarsis, pasión, compañerismo y canciones como soles. El disco. ∎